Hoy pensaba darme una vuelta por la isla para ver amanecer de nuevo pero como está bastante nublado me quedo en la cama un ratito más.
Bajo sobre las 7,30 a desayunar pero como no hay nadie despierto todavía, salgo hacia la playa a dar una vueltilla.
Otra vez veo a mi amiga la garza con otro pescado en el pico del que está dando buena cuenta en el mismo sitio del otro día. Parece claro que conseguir alimento no le supone gran dificultad.