Durante la segunda jornada de nuestra estancia en Gran Canaria decidimos alquilar un coche para recorrer la zona norte y noroeste de la isla, la parte más desconocida por mí hasta ese momento.
Madrugamos y desayunamos a orillas del mar mientras nos informábamos de algun sitio para alquilar un coche.
Allí mismo había una pequeña oficina donde podíamos hacerlo y teniendo en cuenta los pesados trámites, papeleos, fianzas, tarjetas de crédito y las liosas condiciones de alquiler a los que ya estamos acostumbrados, nos resultó sorprendente la rapidez y sencillez con la que salimos de la oficina de alquiler con las llaves de nuestro flamante seat ibiza.